La Yihad es la guerra santa contra el infiel. Su objetivo implica recuperar todos los territorios que han formado alguna vez parte del califato islámico. Si seguimos las enseñanzas coránicas infiel es todo aquél que no sigue los preceptos de Alá y se convierte (tarde o temprano) al islam.
Ahora bien, resulta curioso que exista un grupo yihadista que se hace denominar, Abú Hafs al-Masri, que odie tanto a la derecha como la propia izquierda. Este grupo es el que reivindicó los atentados de Londres y de Madrid, así como el apagón de EEUU que demostró ser una avería.
Ahora amenaza de nuevo y promete castigar a los franceses por su apoyo a Sarkozy en las últimas elecciones presidenciales.
Todo esto no deja de sorprender. Sin duda, aquí hay gato encerrado y no me extrañaría que fuese uno de esos en los que, citando a Mao, Felipe González tanto se inspiraba. En principio, da igual su color, lo importante es que cace ratones se relamía el ex presidente del gobierno. Eso han debido pensar los inspiradores de este supuesto grupo terrorista con la misma vocación totalitaria que nuestros amigos de la izquierda. Lo malo es que, como siempre, los ratones son la derecha "neoliberal". Cuando menos esto demuestra la similitud de objetivos entre los movimientos antiglobi y esta yihad de pacotilla.
Ahora bien, resulta curioso que exista un grupo yihadista que se hace denominar, Abú Hafs al-Masri, que odie tanto a la derecha como la propia izquierda. Este grupo es el que reivindicó los atentados de Londres y de Madrid, así como el apagón de EEUU que demostró ser una avería.
Ahora amenaza de nuevo y promete castigar a los franceses por su apoyo a Sarkozy en las últimas elecciones presidenciales.
Todo esto no deja de sorprender. Sin duda, aquí hay gato encerrado y no me extrañaría que fuese uno de esos en los que, citando a Mao, Felipe González tanto se inspiraba. En principio, da igual su color, lo importante es que cace ratones se relamía el ex presidente del gobierno. Eso han debido pensar los inspiradores de este supuesto grupo terrorista con la misma vocación totalitaria que nuestros amigos de la izquierda. Lo malo es que, como siempre, los ratones son la derecha "neoliberal". Cuando menos esto demuestra la similitud de objetivos entre los movimientos antiglobi y esta yihad de pacotilla.
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